Muchas veces, en una sencilla canción, el bien que quiero no lo hago y hago el mal que detesto. Eso es lo que hizo Rajoy ayer por la noche. Anudar en un todo actividades sumamente diferentes no es lo propio del Sr. Rajoy. El hombre debe saber elegir. Esta elección depende de su autonomía interior. Mas la LIBERTAD es un fruto de la RAZÓN. Es la Razón la que compara los bienes que se nos presentan y los pone en relación con el bien total. Y es, aquí, donde, casi siempre, sucumbe el Sr. Rajoy. El Sr, Rajoy necesita estudiar lógica, lógica proposicional y lógica cuantificacional. Y, a ver cuándo aprenden ustedes a distinguir o diferenciar entre "Verdad" y "Veracidad". ¿Se acuerdan ustedes cuando un tal "Bárcenas"? Rajoy dixit: "En este asunto todo es falso, salvo alguna cosilla". Pues mire usted Sr. Rajoy, esa "cosilla" lo corrompe todo. "Bonum ex integra causa, malum ex cuocumque defecto", decían los clásicos.
Sr. Rajoy..., por su bien, ¡VÁYASE, NO MÁS!
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