Te echo de menos. No sé porqué. Si tuviera que elegir hoy entre hablar contigo o escribir en mi diario seguramente preferiría escribir, no sé porqué .
No sé por qué últimamente asisto a un monólogo en el que las ideas se repiten y los sueños se desvanecen. Tal vez, al reducir tu mundo, reduces el mío. Tal vez, al no tener relación personal excepto con tus silenciados amores, tu universo en el que la imaginación y los sentimientos formaban las líneas majestuosas de tu palabra, se ha reducido a los negros y a los grises. No sé porqué.
Quizás ya no me necesites como antes. Quizás mi mundo te parezca ahora menos lindo, quizás dejaste de amarme, no sé porqué. Todo me habla de ti, todo me lleva a ti: El sol, la lluvia, el viento, las estrellas, o esa Luna que ahora en estos días comienza a crecer.
Yo seguiré mi camino junto a tus recuerdos como siempre ha sido así. Yo romperé el misterio y tus secretos más íntimos, me trenzaré junto a tu alma y pondré mi carne aun joven sobre el ara de nuestro templo. Lanzaré mis alaridos tenues a ese mar en el que soñé tantas veces con tu cuerpo y besé tus píes con adoración y con respeto. Escanciaré sobre tus plantas la esencia de todas las flores tropicales que encuentre y, después, me envolveré en tu magia y en tus besos.
Mañana te buscaré, mañana llegarán hasta ti mis sustantivos y mis verbos. Y, mientras, vamos a bailar. Porque, entre la Fe y el Amor, hay siempre un futuro abierto; un tiempo elástico hacia la Santidad de lo Eterno.
No sé por qué últimamente asisto a un monólogo en el que las ideas se repiten y los sueños se desvanecen. Tal vez, al reducir tu mundo, reduces el mío. Tal vez, al no tener relación personal excepto con tus silenciados amores, tu universo en el que la imaginación y los sentimientos formaban las líneas majestuosas de tu palabra, se ha reducido a los negros y a los grises. No sé porqué.
Quizás ya no me necesites como antes. Quizás mi mundo te parezca ahora menos lindo, quizás dejaste de amarme, no sé porqué. Todo me habla de ti, todo me lleva a ti: El sol, la lluvia, el viento, las estrellas, o esa Luna que ahora en estos días comienza a crecer.
Yo seguiré mi camino junto a tus recuerdos como siempre ha sido así. Yo romperé el misterio y tus secretos más íntimos, me trenzaré junto a tu alma y pondré mi carne aun joven sobre el ara de nuestro templo. Lanzaré mis alaridos tenues a ese mar en el que soñé tantas veces con tu cuerpo y besé tus píes con adoración y con respeto. Escanciaré sobre tus plantas la esencia de todas las flores tropicales que encuentre y, después, me envolveré en tu magia y en tus besos.
Mañana te buscaré, mañana llegarán hasta ti mis sustantivos y mis verbos. Y, mientras, vamos a bailar. Porque, entre la Fe y el Amor, hay siempre un futuro abierto; un tiempo elástico hacia la Santidad de lo Eterno.
A veces, en la vida, hay que quemar las naves para seguir adelante. ¿Cómo? Bailando, entre los dos, un tango. Éste:
TANGO FLAMENCO:
Ahora, con las explicaciones que me diste, entiendo tus textos, donde habla Isis, mucho mejor.
ResponderEliminarPrecioso tango !!!!!